Existen diversas formas de conseguir maximizar el rendimiento energético de los edificios. No obstante, primero debemos asegurarnos de que la integridad del edificio es adecuada.
Se debe garantizar que las instalaciones del inmueble son favorables para que se de un buen funcionamiento y rendimiento energético de los suministros. Por ello, hay que fijarse en:
01 La orientación del edificio
03Los sistemas de climatización
02El aislamiento del edificio
04El sistema eléctrico
Un punto interesante a implementar es el uso de servicios de bajo consumo y energías renovables. No olvidemos, que el aprovechamiento de fuentes de energía renovable reduce la dependencia energética en los edificios.
La idoneidad del tipo de energía renovable a implementar en los edificios, deberá realizarse teniendo en cuenta los factores climáticos, geográficos y funcionales correspondientes a cada caso en particular.
La energía eléctrica se ha convertido en una de las más demandadas debido a sus múltiples beneficios y su gran versatilidad.
Entre todas las ventajas de la administración energética destacamos:
Fácil transporte a través de cableados que alcanzan largas extensiones
Ayuda en el desarrollo de procesos químicos y tecnológicos
Mejora los niveles de vida a nivel de la población mundial
Productividad industrial que se ve traducida en reducción de costes y mayor compromiso ambiental
Independencia energética a largo plazo
Ahorro en facturas y mayor responsabilidad en el uso de recursos naturales a escala individual
Además, gracias a la eficiencia energética, se consigue un balance entre las fugas de aire y asegurar la ventilación adecuada. Y es que, los edificios eficientes energéticamente duran más, son más eficientes y son más fáciles de conservar.
Si tienes dudas acerca de cómo maximizar el rendimiento energético, contacta con nuestro servicio de consultoría energética y pasaremos a estudiar tu caso en la mayor brevedad.